sábado, 13 de diciembre de 2014

Tres reglas para tratar a personas con discapacidad

En muchas ocasiones, cuando nos encontramos frente a una persona con algún tipo de discapacidad no sabemos cómo actuar. Muchas veces la falta de integración está causada por el miedo a equivocarnos al dirigirnos a estas personas o al ofrecerles nuestra ayuda.

Para facilitar la integración de todos, desde el IES Newton os recordamos las tres reglas de oro al dirigirnos a una persona con discapacidad:

1. En primer lugar, somos personas.

Seguro que todos hemos oído hablar de minusválidos, inválidos o discapacitados. Sin embargo, estos términos no son correctos para referirnos a nadie. Todos somos válidos y capaces, sea cual sea nuestra situación. Si queremos referirnos a personas que no pueden ver, oír o caminar, hablaremos de ellas como personas con discapacidad. Lo primero: personas, como tú y como yo. Personas válidas y capaces, que tienen algún tipo de discapacidad auditiva, motora, etc.

2. Si quieres hablar conmigo, dirígete a mí. 

Cuando queremos pedir algo o hacer una pregunta a una persona con discapacidad, lo natural es decírselo directamente a ella. En muchas ocasiones, estas personas necesitan un acompañante que les ayude en algunas tareas, pero eso no debe hacernos pensar que es al acompañante a quien tenemos que dirigirnos. Si la persona con la que hablamos no puede contestar porque tiene dificultades al hablar o por cualquier otro motivo, entonces, el acompañante intervendrá. Pero recuerda que es siempre un signo de respeto dirigirnos a la persona con la que hablamos, tenga o no discapacidad.

3. Pregúntame antes de ayudar.

Si nos acercamos a una persona con discapacidad y creemos que puede necesitar ayuda, lo correcto es preguntar y ofrecérsela antes. Muchas veces nos sorprendemos porque el grado de autonomía de estas personas es mayor del que creemos, por ello no debemos tomar decisiones por nuestra cuenta. Si crees que una persona puede necesitar ayuda para que empujes su silla, para ayudarla a cruzar una carretera, para cargar con peso,... pregúntaselo. Tan irrespetuoso es no ayudarles si crees que lo necesitan como ayudarles dando por hecho que ellos no pueden hacerlo solos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario